Otro domingo en el que pensamos salir al campo sin tener clara la ruta, ya que, con la frecuencia de nuestras salidas, tenemos todas las zonas cercanas a Cuenca bastante trilladas.
Como siempre, unos mensajes la tarde del sábado ponen el alerta al grupo, no hay nada previsto, pero surge la posibilidad de realizar un trazado inédito por Las Majadas, para bajar por la fuente del Rey en dirección a La Losilla y los huertos de Valdeasnos, y la vuelta por la inexplorada cota de La Zomatilla.
Tras un breve estudio del mapa, se aprueba la propuesta, así que como siempre, Domingo por la mañana, café en un renombrado bar de la capital, y rumbo al objetivo.
Las previsiones para el día son de buen tiempo, y así resulta finalmente, una mañana casi primaveral, soleada, con alguna nube alta, pero con una agradable temperatura que nos acompaño en una ruta que, a la postre, resultaría sencillamente espectacular.
Dejamos el coche a la entrada del pueblo, junto al comienzo de la pista que conduce a la fuente del Rey, una vez puestos en orden los dispositivos electrónicos, y la brújula orientada, empezamos a caminar por este primer tramo, bastante conocido ya que lo hemos recorrido en numerosas ocasiones para bajar a la solana de Uña.
Estas horas tempranas son propicias para el encuentro con los ciervos, y así ocurrió, vimos varios grupos, que al detectar nuestra presencia pronto se ponían lejos de nuestro alcance, también pasamos junto a los tiernos terneros que aquí se crían, estos prados y estas aguas son de una calidad fuera de duda.
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| Aprovechando los primeros rayos del sol de la mañana. |
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| El sol se abre paso entre el pinar. |
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| Grandes robles acompañan todo el recorrido. |
Ya en el barranco del molinillo, en las proximidades del las Fuentecillas, tomamos un camino que cruza el barranco por un viejo puente que veremos más adelante, sobre las aguas de la fuente del Rey, camino que nos conduce a los huertos de Valdeasnos y la Losilla. A partir de aquí zona inédita para nosotros.
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| Viejo puente sobre el barranco del molinillo. |
El terreno está realmente embarrado y el agua mana por todas partes, a pesar de que falta alguna gran nevada que alimente los manantiales este invierno, enseguida comienzan a aparecer los restos de antiguos cercados que rodeaban los huertos, bien delimitados por espinos y zarzas, para evitar que el ganado, tan abundante años atrás, arruinase los cultivos. En una sucesión de pequeñas parcelas se organizaban estos huertos, que en su día, debieron contar con gran trajín en las épocas de faena hortícola, con agua abundante y una orientación soleada, no sé que más se puede pedir........
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| Espinos y piedras rodean los huertos. |
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| Protección contra los ganados para los antiguos huertos. |
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| Restos de los muros que separaban los huertos del camino. |
Tras reconocer la zona de los huertos, nos asomamos al cañón del Júcar, desde donde pudimos ver el canal de la Toba al Salto de Villalba, el puente de Royo frío, los cortados de La Muela con sus buitreras, y con la panorámica que se nos abría ante nuestros ojos, situar varias de las rutas ya realizadas por toda la zona.
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| Sobre aquellos cortados está el mirador del Tío Cogote. |
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| Canal de la Toba. |
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| Cañón del Júcar. |
Con estas vistas, asomados al Júcar, paramos para almorzar y reponer fuerzas, y ya podíamos observar nuestro siguiente objetivo, La Molatilla, siguiendo el rastro del paso del ganado y los animales salvajes, subimos a la siguiente cota, entre bosques de robles, con el suelo cubierto de la hojarasca y gran cantidad de mantillo, lo que lo hace mullido al caminar, disfrutamos de la gran belleza de este tramo.
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| Los robles desplegando todo su esplendor invernal. |
En esta zona que une la Molatilla con la Zomatilla, pudimos comprobar el paso del tiempo, tanto en las construcciones semi derruidas de antiguos corrales, como por la erosión en la losa de piedra caliza que deja formaciones bastante sorprendentes.
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| Sólida construcción. |
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| Corral hundido. |
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| Estrías en la caliza. |
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| Por esta cornisa venimos desde la Molatilla al fondo. |
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| Restos de animales devorados por los carroñeros. |
Recorrimos esta cornisa con la vista del cañón del Júcar a la izquierda de nuestra marcha, y sucesivas cascadas de agua que se precipitan al valle, una vez más , cercados aprovechando las cornisas de piedra y la soleada orientación, y llegamos a la Zomatilla, con su vértice geodésico, ubicado caprichosamente sobre un gran pilar de hormigón accesible por una escalinata.
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| Que cortina tan bella. |
Hasta aquí fue el tramo más bonito de la mañana, ya solamente nos quedaba poner dirección de vuelta a Las Majadas, en un trazado casi rectilíneo, pasando junto a la fuente del buitre, a un muladar autorizado para aves necrófagas que nos deparó alguna imagen poco agradable, y un poco más adelante bajar junto a la fuente del Rey, por un bello bosque de roble al pueblo nuevamente, donde tomamos unas cervezas para refrescarnos, ya que pasamos algo de calor, no por la temperatura, que era muy agradable, si no por el atuendo que todavía es de mucho abrigo.
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| Grandes robles junto a la fuente del Rey. |
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| Caballos a la sombra, en la entrada del pueblo. |
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| Creía que se podía acercar a tocarlos. |
Total, que nos salio una ruta de las que no se olvidan fácilmente, recordando el entorno de nuestros antepasados que aquí ubicaron sus huertos, y disfrutando de los parajes y paisajes con que nos obsequia nuestra sierra de Cuenca.
Espero poder seguir contando vivencias como esta en próximas ocasiones.
En el siguiente enlace os dejo el trazado y perfil de esta ruta sencilla y bonita:
Y algunas fotos más.
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| Los valientes tan felices. |
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| Otro valiente. |
Hasta Pronto.
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