Nacimientos en Los Ceños y paso de los carros. Palomera.

Domingo, 27 de Diciembre de 2.015.


Otra de las rutas que solemos hacer en estos días navideños es la de los nacimientos. Es costumbre que distintos colectivos instalen algún nacimiento por la sierra, en esta ocasión tenemos dos de ellos en el paraje de Los Ceños, el del Club Quinto Pino, que siempre está en este punto, y este año la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Cuenca también lo han montado aquí, así vemos los dos en el mismo día, el pasado año lo ubicaron junto al paraje de las Fuentecillas en Las Majadas, podemos ver la ruta en el siguiente Enlace, aquella mañana vimos la nieve, pero este año seguimos con la sequía y unas temperaturas muy altas.

Tras visitar el nacimiento del río Huécar, y comprobar como la falta de agua merma sensiblemente su caudal, avanzamos por el carril que remonta el arroyo de la rambla, hasta un punto donde se convierte en senda, paramos el vehículo y comenzamos a caminar en dirección al paso de los carros. 


Imagen típica del lugar, esta noche ha helado un poco.




Vamos avanzando por el reseco cauce del arroyo.




La vegetación delata la naturaleza húmeda del lugar, pero las lluvias no llegan.




El sol empieza a ganar terreno.




En estas rocas suele acumularse el hielo en los inviernos normales.

Nos desviamos del cauce para ver un pequeño barranco totalmente pétreo, en ocasiones también baja el agua por aquí.












Siempre nos gusta echar un vistazo a este rincón, el caso es que seguimos caminando, y el siguiente punto interesante de la mañana son los surcos de los carros grabados en la caliza, el trajín de los carros y la pausada labor del agua, han dejado estas marcas indelebles del historias pasadas.


Apenas un poco de agua en las pozas.













Aquí apreciamos perfectamente los surcos.




Mientras tanto va entrando la mañana, nosotros vamos a subir por esta ladera de la derecha en busca de la senda que nos lleve a Los Ceños.




Hemos salido del barranco y el sol nos va a acompañar un rato. Por esta senda discurre el sendero pr-cu 35 entre Palomera y Buenache de la Sierra.




Enseguida llegamos a Los Ceños. unas formaciones rocosas, a modo de Callejones.








Con sus hiedras adosadas a la roca.

Esta es la zona donde se ubican los dos nacimientos.






El de El Quinto Pino.




Que está mas o menos detrás de estos ojos.




Es que estas cavidades se prestan a ello.








Y el de los amigos del Camino de Santiago.

Hoy el objetivo era este, dar un paseo por el campo y ver nos nacimientos, ahora tenemos que volver, hay varias opciones, vuelta por el mismo camino, acercarnos al mirador del Ceño sobre la dehesa de Cotillas y volver desde la cabecera del barranco de la Rambla, o buscar nuevos horizontes. Nosotros hemos optado por esta última opción, hemos puesto rumbo al portillo del tabaco, y desde allí hemos bajado por el barranco de la hoya negra, que por lo que parece es bastante frecuentado por ciclistas y moteros, hasta enlazar de nuevo con el sendero por los carros, pero eso lo dejamos para otro día.


Echamos un último vistazo a los ceños.




Y junto a este gran ejemplar nos dirigimos hacia el portillo del tabaco.

Esta ha sido la última ruta del año 2.015, el próximo año seguiremos caminando y contándolo aquí. Intentaremos conocer nuevos parajes, y en todo caso disfrutar al máximo de nuestra sierra.



Hasta Pronto!!!




En Nochebuena los tres Picos.

Jueves, 24 de Diciembre de 2.015.


El día de Nochebuena, hoy también salimos a caminar, pero por los alrededores de la capital. En los últimos años la ruta que nosotros llamamos de los tres picos, se convierte ya en un clásico para la mañana de este día. La ruta del pasado año la podemos recordar en este Enlace, aquella mañana heló bastante y había gran escarcha, este año el tiempo está siendo desgraciadamente muy cálido y seco, y nos ha dejado una buena mañana para caminar.

Hoy no nos vamos a extender mucho en las explicaciones, la ruta ya la hemos contado varias veces, pero vamos a ver las grandes vistas que nos ofrecen estos miradores por los que vamos a caminar.

Comenzando por la subida al Cerro del Socorro, desde el barrio de los Tiradores, bajaremos por el Viacrucis hacia el Huécar, subiremos por la senda de los Hocinos al cerro de San Cristobal, el de las Antenas, bajaremos por sendas al Júcar, para volver a subir esta vez al cerro de la Merced, sobre el barrio de San Antón. Una ruta rompe piernas, muy adecuada para preparar estos días que se avecinan.



Desde el cerro del Socorro, las vistas del casco antiguo son tremendas.




Nos acercamos un poco a las Casas Colgadas.




Luego iremos por allí arriba, para bajar por San Antón, que aparece allí a la izquierda.




Pero primero hemos de ir a las antenas.




Hemos bajado por el viacrucis y, junto al puente de San Pablo nos asomamos para ver la gran poda del arbolado.













Estaríamos horas en este punto, pero hemos de continuar.

Tras el paso por el cerro de las antenas, bajamos a la zona de las Grajas, en el río Júcar, donde hay tan poca agua que las truchas se dejan ver.


Manifestación truchera.




Cruzamos el río para coger la senda que nos conduce a San Julian el Tranquilo.




Subimos por el escalerón.




Y nos presentamos ante la ermita.




Donde tienen preparada esta estufilla para la misa del Gallo, que tradicionalmente se celebra aquí esta noche.

Por detrás de la ermita sale la senda que nos va a subir a lo alto del cerro de la Merced, desde donde tenemos nuevas perspectivas del casco antiguo.


Con el castillo y la zigzagueante bajada a las Angustias.








La iglesia de San Pedro, escoltada por la caliza de la hoz del Huécar.




Avanzamos y nos va apareciendo también la parte nueva.




Las Angustias, la Catedral, San Miguel, el Seminario....




Otro ángulo del castillo y la antigua prisión.




La parte trasera de la iglesia de San Miguel.




Y de repente estamos sobre el barrio de San Antón. desde donde vemos ya toda la parte nueva de la ciudad.




Y la iglesia de la Virgen de la Luz, patrona de la ciudad.


Llegados a este punto, únicamente nos queda bajar por las estrechas callejuelas del barrio, en plena rehabilitación que falta le hacía, tomar unos tercios en el bar del barrio, y continuar por la calle de los tintes, junto al Huécar para finalizar la ruta de hoy, con unos 15 km. de caminata y el cuerpo preparado para lo que nos echen.

En el siguiente enlace os dejo el trazado y perfil de la ruta del día de hoy:



Hasta pronto!!!

Ruta circular por Valdecabras.

Domingo, 13 de Diciembre de 2.015.

Se acerca el fin de año y hoy hemos convertido nuestra ruta en una jornada lúdico/festiva. Pasaremos la mañana por la zona de Valdecabras, para terminar con una comida festiva en el restaurante del pueblo. 

El objetivo hoy es ambicioso, ya que no hay que volver a casa al medio día, y vamos a unir dos de las rutas que solemos hacer por aquí. Tomando como punto de partida la localidad de Valdecabras, subiremos a recorrer las cornisas que encontramos sobre la carretera, justo enfrente del pueblo. Tenemos que desandar un poco de camino, ya que la ruta empieza realmente junto a la tina que hay en el cruce del pueblo. Daremos la vuelta al puntal de la Olmedilla, para subir por un barranco a un rincón con unas rocas muy curiosas, en ese punto habremos ganado altura suficiente y ya casi todo va a ser llanear junto a los abismos. Buscaremos la fuente de la Canaleja y saltaremos a la zona de los Aserraderos, veníamos por la parte izquierda del Valle y nos colocamos en la contraria, para bajar por el río Valdecabras. Pero vamos por partes.

Aquí tenéis a los muchachos sobre la tortuga (nosotros la llamamos así), luego la veremos mejor.

El caso es que nos ponemos a caminar en esta mañana que ha amanecido con nieblas, hace tiempo que no tenemos nieblas, esto no parece otoño ni nada. 


Hoy si, tenemos nieblas y parece otoño, la temperatura es muy buena, solo falta el agua.



Las brumas ocultan el recorrido de hoy.




Pocas son las tinás que encontramos tan arregladas.




Caminamos sobre la reseca alfombra de hojas de roble.




Un poco más adelante encontramos ya la senda que nos llevará sobre las rocas.




Aquí conviven los robles y pinos, junto con algún terreno de labor. Tras las nieblas vemos la entrada a la Cambronera, donde estuvimos hace unos días.




Según vamos ganando altura aparecen los grandes bloques calizos que nos acompañarán durante toda la mañana.




Toda esta zona del Valle de Valdecabras es muy húmeda, con muchos manantiales y surgencias, en este caso pasamos sobre esta turbera, formación herbácea típica de suelos encharcados.








Por fin llegamos a la Tortuga.




Aunque también parecen extraños seres que parecen querer despegar.




En fin, que la erosión es muy caprichosa.




Con sorpresa vemos como la fuente que se encuentra en este curioso rincón, sigue echando agua, a pesar de los meses de sequía que estamos pasando.

Llegados a la cabecera de este barranco, ponemos rumbo hacia el Llano del Calar, desde donde nos vamos a asomar al Valle de Valdecabras, y podremos contemplar grandes vistas, desde aquí continuaremos hacia la fuente de la Canaleja.


Las nieblas se van levantando, pero no se aclara el cielo todavía.




Frente a nosotros aparece Valdecabras, envuelta en la neblina.




Sobre esta magnífica cornisa caminaremos.




Pero antes de continuar hay que almorzar.






Estas rocas son los dominios del Buitre Leonado, nos encontramos un grupo muy numeroso sobrevolando nuestras cabezas, aquí podemos ver a uno de ellos, dominador de los cielos.










Y mientras seguimos avanzando nos asomamos sobre el pueblo.




Luego bajaremos por aquel valle, el del río Valdecabras, con los altos de Mirabueno al fondo, hay que dar una vueltecilla antes de llegar allí, ea.




¡Mira! otros dos allí arriba.




A todo esto, no he dicho que para llegar a la fuente de la Canaleja desde el llano del Calar hay dos opciones, por encima de las piedras que vemos aquí o por una senda que discurre por debajo de ellas, nosotros vamos por esta senda.












Caminando por aquí nos encontramos una de las fuentes que abundan en esta zona, con unos renacuajos en su poza, es Diciembre, no se yo si esto es muy normal a  estas alturas.




Miramos atrás para ver el camino recorrido.




Y enfrente, luego iremos por allí arriba.

Estamos llegando a una zona donde abundan las cuevas y los corrales, antiguamente aprovechaban estas solanas para cobijar a los rebaños.


Y es que estos escarpes ofrecen mucho abrigo.




Aún se conservan los viejos muros, no así las puertas y alguna pequeña cubierta, cuyos materiales soportan peor los rigores de la intemperie.




A la parte derecha de esta imagen, aunque no sale, se encuentra la entrada a una de las cuevas, nosotros no somos muy de cueva, así que seguimos nuestro camino.




Lo que no ofrece duda es la buena orientación de estas construcciones.




Las dejamos atrás.




Desde la cabecera del barranco de la Canaleja estas son las vistas.




Cabecera donde las piedras se encuentran en difícil equilibrio, y nos dejan estas imágenes.




Bueno.... y estas.




Madre mía que poses.




Total, que caminando caminando, nos hemos puesto en la fuente de la canaleja, con un caudal más reducido de lo normal a estas alturas de año, aguanta bastante bien el tipo.

Hemos llegado a la fuente de la Canaleja, desde aquí podemos bajar al pueblo por el barranco, que en tiempos húmedos es un espectáculo de agua, esta sería una de las rutas que solemos hacer en esta zona, pero como ya dijimos al principio vamos a continuar para unirla con otra ruta habitual, subida por el barranco hasta la fuente y continuar por donde vamos a ir ahora, para bajar luego por el río Valdecabras. La cosa es sencilla, caminamos en dirección al pueblo, pero por encima de las rocas, no por el barranco, hasta llegar al paraje de los Aserradores, desde donde nos asomamos al valle del Valdecabras.


Ya estamos, por aquí también hay dos opciones, caminar por aquí arriba o por la senda que va justo debajo de estos cortados, en este caso vamos por arriba en dirección a los altos de Mirabueno.








Y vuelven a aparecer curiosas formaciones.




Colonizadas por arbustos que con poco se conforman.








Esta piedra debe se la más fotografiada de la zona, pero es que es pasar por aquí y la cámara se dispara sola, no lo puede evitar, ni nosotros queremos.




La mañana avanza, el sol se está abriendo paso y la hora de comer se acerca, nosotros continuaremos un poco más arriba de aquel puntal que vemos y bajaremos campo a través al valle para volver al pueblo.








Por la parte derecha de esta imagen hemos podido encontrar la bajada.




Y ahora un poco de "arrastraculos" sobre la alfombra reseca de las hojas de los Robles.




Una vez abajo enlazamos con el trazado del sendero Pr-Cu 49, muy recomendable.




Venimos por esta senda junto a viejas tapias.




Y entre densos matorrales.

Muy cerca ya del pueblo, podemos echar la vista atrás y ver parte del recorrido de la mañana.


Por allí la zona de los corrales y las cuevas.




Hace un rato caminábamos por allí arriba.








Con un poco de zoom, las rocas sobre las que vimos a los buitres.




Y finalmente llegamos al pueblo, entre nubes y claros.

Al final nos han salido unos 17 kilómetros de caminata por unos parajes únicos, que no nos cansamos de recorrer. Únicamente nos ha faltado el agua que a estas alturas del año debía brotar por todos y cada uno de los rincones de estos barrancos, en fin, ya lloverá.



Y para terminar, el autorretrato de rigor tras la copiosa comida. Las botellas son de "atrezzo", nada que ver con la realidad.



En el siguiente enlace os dejo el trazado y perfil de esta ruta que bien merece una visita:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=11738484

Os animamos a venir y conocer estos parajes, no os dejarán indiferentes.

Hasta pronto!!!