La Raya y el Escalerón en Uña. Pr Cu 37, Serranía de Cuenca.

 Sábado, 13 de Noviembre de 2021.

Mediados de Noviembre, y volvemos a Uña. Como lo prometido es deuda, ya dijimos que aquí quedó apalabrada una nueva ruta con el equipo amateur. Y claro está, no podía ser otra que la popular ruta de El Escalerón y la Raya, Pr Cu 37. Si cuando estuvimos aquí a primeros de Octubre, el Otoño ya apuntaba maneras y daba un colorido espectacular al entorno de la Laguna, hoy nos encontramos mediada la estación y toda la vegetación cercana a la Laguna ha perdido ya la hoja, preparándose para el duro invierno.

De subida hacia la Raya, si que vamos a poder disfrutar del Otoño en los Robles, Arces y demás arbustos espinosos, que aguantan un poco más. Esta es una ruta que no defrauda en ningún momento del año, exceptuando lo más crudo del verano, meses estos en los que hay que buscar lugares más frescos.

El caso es que estamos en otoño y es lo que toca. Empezaremos la ruta de hoy subiendo primero hacia el paso de La Raya, y luego bajaremos por el Escalerón. El recorrido que vamos a hacer esta mañana, es de los que te mantiene alerta en todo momento, a cada paso hay una buena panorámica, un nuevo punto de vista, o simplemente uno de los buitres del lugar planeando sobre nuestras cabezas, o calentando sus plumas posado en cualquier cornisa.

El lugar privilegiado en el que nos encontramos, hace que esta sea una de las rutas más concurridas de la provincia de Cuenca, lo tiene todo. Y por ello es una de las más conocidas, con lo cual poco más vamos a poder aportar, excepto una buena colección de imágenes que hicimos aquella mañana, que prácticamente se comentan solas. Hoy volvemos a tener ese gran problema con la selección, intentaremos resumir al máximo. Aquí os dejo el enlace a la ficha oficial del sendero. El Escalerón y La Raya

Cuando empiezas a caminar, y el sendero presenta estas credenciales, el lío está servido.

Y es que es pecado mortal, pasar por aquí y no hacer estas fotos una y otra vez.

Observar la fauna de la Laguna, también es obligado. Aunque los invasores como este Cormorán no nos gustan nada. Pero ¿Qué digo de invasores?, ¿y nosotros que somos para ellos?. No nos liemos que hemos venido a caminar, nada más y nada menos.

Pues eso, con el puntal de Peña Rubia allí presidiendo la escena, empezamos el ascenso a La Raya.

Solo es cuestión de seguir las señales.

Y ya empezamos a mirar hacia arriba.

Con esa luz tempranera, que domina la mañana.

Y la roca que va a ser la protagonista toda esta jornada.

Y protagonista será también la laguna, oculta por los chopos desnudos ya a estas alturas de Otoño.

Desde un poco más arriba, volvemos a ver a estos dos bandidos de agua dulce.

Ya casi llegando a la zona de La Raya, se nos abre una buena panorámica de la laguna.

Y en el centro de esta imagen, volviendo a mirar hacia arriba, el paso de la Raya.

Llegamos al primer punto clave de la ruta, esta faja rocosa que recorre el gran farallón de la Muela. Luego continuaremos la marcha hacia el fondo de la imagen, pero antes vamos a dar por aquí una vuelta.

Y es que nos vamos a asomar al rincón de Uña, a ver la Laguna y el pueblo antes de continuar la marcha.

Hola!!

Con la luz que tenemos esta mañana vamos jugando con los colores de este Otoño.

Al otro lado, asoma el puntal de Peña Rubia.

Y desde aquí se nos abre ya una muy buena vista de la Laguna y el pueblo de Uña.

A la vuelta de estas rocas, nos adentramos en la zona del Rincón de Uña.

La faja rocosa continúa hasta el último saliente y un poco más, luego hay que dar la vuelta.

uuhhh!!!!! Cazados!!

Vamos a ir dando la vuelta, ahora vamos a subir a la parte más alta de la Muela, para continuar nuestro recorrido por el Pr.

Pero al paso van saliendo nuevas y diferentes vistas del pueblo.

Otra más entre las rocas.

Una mirada atrás, y subimos.

La subida se hace por un estrecho y húmedo callejón.

Estamos arriba, ahora las vistas van a ser insuperables.

Siguiendo en esta dirección, llegaríamos a Las Catedrales.

Es curioso como la vegetación se aferra a estos bordes rocosos.

Inevitable.

El recorrido, ahora va por un camino muy cercano a estos cortados, nosotros seguimos ruta acercándonos cuidadosamente a los abismos.

Al fondo de la imagen, vemos el puntal del Cuerno, allí a la derecha.

Estamos en el reino del Buitre, y empezamos a verlos posados en las rocas.

El Otoño está avanzado, y los frutos del rosal esperan a modo de despensa.

El viejo pino, ya caduco, otra foto imprescindible en esta ruta.

Abajo tenemos la piscifactoría. Y a la derecha vemos el sendero que baja desde el Escalerón, luego caminaremos por allí.

Parece que hay reunión de vecinos, los del primero, poniendo finos a los del segundo. Benditas comunidades.

En el bloque de al lado, no quieren opinar.

Y estos tomando nota, deben estar buscando casa. ¡Menudo percal!

Dejando las cuestiones domésticas aparte, tenemos allí enfrente la zona del Escalerón por donde bajaremos.

Y a cada paso un punto de vista nuevo.

Nosotros vamos a ir recorriendo todos estos bordes del cortado, al fondo de la imagen, el sendero se aparta un poco hacia el monte, pero vamos a tomar un pequeño atajo para seguir viendo este magnífico panorama que tenemos esta mañana.

Claro está que hubo parada para el almuerzo, aunque no nos haga falta. 

Y las vistas, esta es una ruta en la que no podemos bajar la atención, cada paso ofrece una vista nueva.

En este punto, ya hemos abandonado el sendero.

Y nos vamos a acercar a aquel rincón que queda fuera de la ruta señalizada. Un pequeño remanso de paz en esta multitudinaria ruta.

Ya te digo, avanza la mañana y todos los puntales están siendo colonizados por senderistas y visitantes.

La clave está en no perder la perspectiva del lugar.

Nos acercamos a ese rincón que vamos a conquistar esta mañana.

Con la roca siempre presente.

Y las vistas.

Muy buenas vistas sobre el rincón de Uña.

Y esa luz reflejada en las paredes verticales de esta Muela.

Continuamos ruta, aprovechando algún paso de animales, para conectar de nuevo con el sendero señalizado.

Y los puntales a rebosar.

Seguimos cuidadosamente por los bordes del abismo.

Y en un momento estamos sobre la bajada por el Escalerón.

Ya tenemos de nuevo a la vista la Laguna. Emprendemos la bajada por el cómodo sendero que nos desciende suavemente hacia el final de la ruta.

Sin perder de vista la rica vegetación adosada a las rocas.

Ni a la graciosa fuentecilla que nos encontramos en la bajada.

Ya en la parte baja, no quitamos la vista hacia los cortados sobre los que hemos venido caminando.

Y terminamos junto a la laguna, volviendo al pueblo por la carretera que se dirige a la piscifactoría.

Un entorno único.

Al final una buena mañana en el monte, recorriendo este popular sendero e intentando crear afición, vamos por buen camino. En este momento ya tenemos otras dos rutas pendientes con este personal, ya las iremos contando. Después de terminar, siempre hay que hidratar, y así fue. Tercios y comida en Uña, para rematar una buena mañana de campo y naturaleza.

Hasta pronto!!!