Peña del Acebo - Casa quemada - Cerro Candelar.

Domingo, 20 de Diciembre de 2.014.


Se van acercando las fiestas navideñas y los grandes retos hay que dejarlos para mejor ocasión, hoy hemos dado un agradable paseo por la peña del Acebo y la casa Quemada, para terminar en el vértice geodésico de Cerro Candelar. Hoy la ruta es casi llana, en medio de un denso pinar de pinos albares en su mayoría.





Con el vehículo aparcado en la peña del Acebo comenzamos nuestro camino en dirección a Casa Quemada, bordeando la ceja de la muela, con las vistas del monte Pie Pajarón, y aunque podemos ver brillar la escarcha en la carretera, enseguida el sol hizo el ambiente muy agradable.


Hoy la helada ha sido generosa.





Uno de los acebos que dan nombre a este paraje.





La masa forestal no tiene fin.





El cerro de la Bandera en el centro de la imagen.

Esta zona de la sierra además de su riqueza forestal se caracteriza también por su abundante población de Ciervos, Gamos y Corzos, durante todo el recorrido fueron numerosos los grupos de estos animales que nos fuimos encontrando, pero con nuestros escasos medios no podemos fotografiarlos, ¡a ver si nos traen los Reyes Magos una buena cámara algún año de estos!!!!!



Este pino gemelo con su corte de enebros.





El sol gana terreno a la escarcha.

Nos apartamos un poco de la ceja para ver los restos de  Casa Quemada, y lo que encontramos hoy es un pequeño refugio en lo que antaño sería una casa forestal. Continuamos nuestra marcha bordeando la muela con las vistas hacia la zona del Maillo, que ya recorrimos otro día. El Maillo.










Atravesando estos pinares nuestro siguiente objetivo la sima Muérdago II y los callejones de la Chillarona, ya sabemos que en la sierra de Cuenca abundan las cuevas y simas, formaciones que nosotros no estamos muy animados a explorar.




Enseguida llegamos a los citados callejones, una de tantas formaciones que nos recuerdan a los de las Majadas, de mayor extensión y profundidad.







En estos callejones los musgos y helechos encuentran su hábitat ideal.

















Después del almuerzo en los callejones pusimos rumbo al Cerro Candelar, con su torre de vigilancia, y comprobamos que hasta aquí llegó el devastador incendio de 2.009, que arrasó un buen número de hectáreas de pinar, creo que unas 2.000, al mismo tiempo otro terrible incendio hacía lo propio en Poyatos.


Desde aquí tuvo que ser un infierno contemplar tan desolador panorama.










Cerro Candelar 1.533 metros.







El camino ya es de retorno hacia la peña del Acebo, y bajamos por el piñonar hacia la loma de las charcas en medio de un panorama desolador, aquí no se está regenerando el bosque ni poco ni mucho.


Vista desde la zona de la torreta de incendios, el suelo es bastante pedregoso y no nace un pino ni medio.















Nada que ver con los pinares que hemos recorrido esta mañana. 

En el perímetro de la zona más arrasada vemos las secuelas del fuego en la corteza de los pinos, que afortunadamente pudieron salvarse.





Ya solo nos faltaba remontar esta loma de las charcas para poner punto final a la ruta, al filo del mediodía. 

















Total que hemos pasado otra mañana llena de contrastes, fría al principio y tibia al final, y viendo el terrible efecto de los incendios que esperamos no se vuelvan a repetir.

Al final un refrigerio en Uña y de vuelta a casa. Hoy no tenemos enlace a trazado de la ruta, pero con los mapas en mano no tiene pérdida.


Hasta pronto!!!!!








Vértice geodésico de La Herrada.

Domingo, 7 de Diciembre de 2.014.

Medio puente festivo y avance de invierno, hoy nos  ha sorprendido la nieve como quien no quiere la cosa. La ruta prevista para hoy no es muy larga, pero los imponderables de la mañana nos han hecho acortar un poco más. No pasa nada, cada día es una aventura y hay que afrontarla según se plantea.

Nuestro objetivo hoy es el vértice geodésico de la Herrada, que ya intentamos coronar en el mes de Marzo, pero no pudimos llegar debido a la orografía del terreno y que acometimos el intento desde muy lejos. Os dejo el enlace a la ruta anterior: primer intento Herrada. Aquel día se nos alargaba mucho la ruta y decidimos volver.

Hoy el inconveniente ha sido el hielo de la carretera, que nos ha obligado a extremar precauciones al volante y nos ha costado un poco más llegar al comienzo de la ruta.

Hemos dejado el vehículo en la cabecera de la rambla grande de Monteagudillo y hemos comenzado a caminar entre sabinas y pinos, ya teníamos ganas de pisar la nieve y esta nos ha acompañado toda la mañana.


En dirección a la casa de la sabina bajamos un par de barrancos con pinos de repoblación, tan ordenadicos.



Que gusto fotografiar la nieve, aunque con poco espesor lo cubría todo.

Al llegar al fondo de este barranco comenzamos a remontar la ladera de lo que en los mapas nombran como monte el Picuerzo, en constante ascenso hacia el vértice de la Herrada, bastante pronunciado el principio y suavizándose poco a poco hacia la cumbre.

Ya con la cima a la vista la nieve ganaba espesor por la acumulación de las ventiscas.





Esta vez sí, hemos podido llegado a esta cima que con sus 1.549 metros de altura ofrece grandes vistas de la Sierra, desde la zona de la Toba hasta el collado Bajo.


Ya se intuyen  las panorámicas.





Por más que me empeño no consigo llegar el primero a ninguna de las cumbres!!!!!!. Definitivamente lo mio es el descenso.





La ceja de Peña Betaya.





Aquí, además de mi dedo, podemos ver a la derecha el cerro de San Felipe, que subimos el pasado fin de semana, hacia el centro de la imagen a la izquierda de ese pino vemos las rocas de Peña Rubia en el Masegar de Huélamo, y las cumbres que vamos viendo hacia la izquierda el cerro de la Bandera y todos los que siguen hacia Tragacete.





El cerro de San Felipe un poco más ampliado.





Allí arriba, la ladera nevada que se aprecia es el Collado Bajo.

Esta mañana tan soleada estaba muy ventosa y tras una fotos en la cumbre buscamos cobijo para el almuerzo.















Hoy hemos vuelto casi pisando nuestros pasos, a la bajada nos hemos desviado un poco hacia el cerro de la muda, y hemos bajado al barranco en busca de nuevo de la casa de la encina, casa que no hemos visto, pero sí esta bonita fuente con sus grande gamellones.


Con el solecillo de la mañana la nieve comenzaba a desaparecer.





Vista la fuente seguimos camino.

Y otra vez de vuelta a los pinares del principio para buscar el vehículo en la cabecera de la rambla de monteagudillo.









Total, otra mañana de campo hoy con el aliciente de la primera nevada de la temporada en la sierra de Cuenca, y es que nunca dejamos de sorprendernos con lo que cada día nos depara. Hoy han sido unos 9 kilómetros cómodos y fáciles.

Os dejo el enlace al trazado y perfil de esta ruta breve pero intensa:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8398438

Hasta pronto!!!!!!


Circular San Blas, San Felipe, río Cuervo.

Domingo 30 de Noviembre de 2.014.


Este fin de semana se presenta lluvioso, ya era hora, por que estamos teniendo un mes de noviembre de lo más primaveral. Tras descartar una gran ruta prevista fuera de nuestra provincia debido a las inclemencias meteorológicas, y con las ganas de que no se malograra el domingo decidimos hacer una ruta circular por el corazón del parque natural de la serranía de Cuenca. El terreno elegido nunca defrauda y mereció la pena el cambio, la ruta prevista ha quedado aplazada a la primavera del 2.015 cuando la nieve deje despejada la cumbre del pico del Lobo, cima de Castilla la Mancha que nos proponíamos coronar hoy.
Total que para ir sobre seguro decidimos volver al Cerro de San Felipe, alargando el trazado hasta el nacimiento del río Cuervo y regresando por el camino de las Acebeas y el cerro del Hontanar hasta la fuente de San Blas que fue nuestro punto de partida, nos salió una ruta circular de alrededor de 23 km. por parajes bellísimos, cumbres ventosas, densos pinares y un gran bosque de acebos digno de ver.



Lugar de comienzo de la ruta, con el río Júcar casi en pañales todavía.





La fuente de San Blas, con sus frescas aguas.

Como digo comenzamos aquí nuestro caminar, remontando el río Júcar por el estrecho de San Blas en dirección a su nacimiento, poco antes de llegar al estrecho del infierno tomamos un viejo carril que nos subirá hasta un collado apenas a un kilómetro de la cima de San Felipe, hasta donde llegaremos ya por senda pedregosa entre sabinas rastreras y viejos pinos albares.



En mitad de la subida una mirada atrás para ver de donde venimos.


La mañana estaba amenazando lluvia, pero la intensidad del viento nos hacía pensar que el agua pasaría de largo, lo que no pasaba era la niebla que en estas cotas se hace más densa creando un ambiente especial.




Volvemos a mirar atrás para ver el collado donde termina el viejo carril.


Estamos a punto de hacer cumbre en nuestro primer objetivo y la senda serpentea entre la niebla y la vegetación de alta montaña.







Nos gustan estas laderas.





Y estas sendas también.


Hoy la densa niebla nos priva de la gran panorámica de la sierra que desde aquí se tiene en días claros, pero teníamos el aliciente de mantener nuestros sombreros sobre las cabezas, el viento nos los quería arrebatar.


















El vértice geodésico del cerro de San Felipe con sus 1.838 metros.










Aquí estamos cubriéndonos un poco mejor contra el viento.





Bueeeeno.... vamos a sacar un poco al fotógrafo de hoy, que parece que no venía, pero si.

Desde aquí continuamos rumbo al nacimiento del río Cuervo, siguiendo por la cresta, pasando por el paraje del Ojuelo, y atravesando la cañada real, en un suave descenso hacia el nacimiento.

Continuamos por la cresta.





En medio de esta niebla, por la cañada, vamos bajando en busca de la senda que nos dejará en el área recreativa del nacimiento.


Enseguida nos situamos sobre el nacimiento mismo del Cuervo.


Esta es una vista muy poco habitual del rincón del nacimiento del Cuervo, estamos literalmente sobre las cascadas.



Aquí enlazamos con una senda señalizada como ruta del parque natural, que nos baja entre albares y bujes, de manera repentina.









Este sendero cuenta con paneles informativos relativos a la vegetación del entorno.
















El boj colonizado por los líquenes.





Monolito en el nacimiento.

Llegados a este punto lo que procede es beber agua en la fuente que hay junto al aparcamiento y reponer fuerzas para la vuelta, todavía no llueve y hay que aprovechar.






Y antes de continuar nuestra caminata hicimos la visita de rigor a las primeras cascadas, que aunque todavía no están en todo su esplendor ya apuntan maneras.

No nos cansamos de ver estas imágenes.

















Tras la visita a las cascadas tomamos un café en un bar de la zona y continuamos marcha hacia las Acebeas, y fue en este momento cuando comenzó a llover, con unos 12 kilómetros por delante pero ya por una pista forestal en perfecto estado que nos agilizó la marcha. Aún nos dio tiempo a hacer alguna foto cuando la lluvia no arreciaba todavía, dejando constancia del denso pinar con su sotobosque de acebos.


Este paraje que atravesamos está densamente poblado de acebos.















Los colores se resaltan con la lluvia y nos regalan grandes imágenes.





El monte bajo con una mezcla de buje y acebo.

La lluvia se hacía más intensa, guardamos los "tomavistas" y agilizamos la marcha hacia el hontanar disfrutando de la húmeda mañana. En una caseta con techado que hay junto a San Blas, ya de vuelta nos pusimos ropas secas y terminamos la ruta en el punto de partida.



De vuelta al punto de origen.

Hoy la ruta se ha hecho larga, unos 23 Kilómetros con viento, niebla y agua para hartar, así que la terminamos comiendo en Tragacete al calor de unas sopicas.



Tan majos todos, nada que la cuchara no arregle.


A pesar de todo pasamos un gran día, en un entorno sin igual. Os dejo el enlace al trazado y perfil de esta ruta:


http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8361543


Hasta pronto!!!!!!