Remontando el Arroyo Frío, en El Cerviñuelo.

Domingo, 22 de Julio de 2018.


Finales de Julio, después de nuestra salida a tierras madrileñas, y algún que otro paseo serrano, volvemos a la zona del Cerviñuelo, hace algún tiempo que no vamos a la cascada del Fraile, y ya nos estaba rondando la cabeza la idea de volver por estas tierras.

El caso es que, aprovechando esta entrada del blog Magia Serrana:
http://elbrilloenlamirada.blogspot.com/2018/06/el-tramo-alto-de-arroyo-frio-y-el-valle.html, Nos lanzamos a remontar el tramo alto de Arroyo Frío, nosotros lo vamos a encontrar en gran parte del recorrido sin agua, pero ha resultado ser un barranco duro y bello a partes iguales.

Vamos a hacer la ruta circular desde el Cerviñuelo, con el vehículo estacionado muy cerca de la fuente del vaso, nos dirigimos por una cresta en descenso hasta la casa de La Hortizuela, remontamos el vallejo que nos sube a un collado, el de Los Frailes, desde donde bajaremos al encuentro de Arroyo Frío, nos asomaremos a ver la cascada, para luego empezar a remontar el barranco de vuelta al punto de partida. Hoy tiene la ruta todos los ingredientes que nos gustan, campo a través, barranco, agua y un poco de aventura e incertidumbre sobre lo que nos iremos  encontrando.

Arroyo Frío, poco antes de verter sus aguas en la famosa cascada del Fraile.

Hemos parado un poco más allá de la fuente del Vaso, pero con el zoom vemos sus gamellones.

La primavera ha sido tan generosa, que a estas alturas de Julio todavía encontramos prados verdes.

Pero las auténticas reinas del Cerviñuelo son estas Sabinas Centenarias.

Solo esto ya merece la visita a estos parajes.

Tenemos cielos variables, que al final de la mañana agradeceremos, hasta cuatro gotas nos han venido a refrescar.

Dejamos las Sabinas y continuamos hacia nuestro objetivo.

Venimos caminando un par de kilómetros por pista forestal, ahora la dejamos para empezar el descenso hacia la casa de La Hortizuela, bajamos por una loma campo a través, con gran desnivel, que en alguna ocasión debió ser utilizada para arrastrar maderas. Desde este puntal, antes de acometer el descenso, tenemos buenas vistas de gran parte del Valle del Escabas.



Vemos el pueblo de Poyatos.

El valle del Escabas en dirección hacia Fuertescusa.

Por debajo de estos riscos subiremos hacia el collado de Los Frailes.

Pero antes bajaremos hasta la casa de La Hortizuela.

La cosa se pone pendiente, y en el tramo final un arrastradero de piedra suelta que nos puso las piernas a tono. Descendemos 350 metros de altitud en un kilómetro de distancia.

Como buena loma/cresta, encontramos su tramo rocoso.

A toso esto, Rebeca caminaba feliz, ajena a la "tragedia final",jejeje.

Finalmente llegamos abajo, al arroyo de La Hortizuela, que ya remontamos en otra ocasión.

Y encaramos el siguiente tramo de la ruta, subiremos al collado de Los Frailes por este vallejo.

Encontramos por la parte izquierda del vallejo una vieja vía de saca muy deteriorada por la que subimos cómodamente.

Pero antes hay que parar a reponer fuerzas, nos harán falta luego más adelante Tomamos aquí el tentempié de la mañana., mientras recordamos nuestra anterior ruta por la zona: Arroyo de La Hortizuela.

Echamos la última mirada a la vieja casa y continuamos la marcha.

Con los pliegues calizos de la otra parte del barranco a nuestras espaldas.

La vegetación engulle poco a poco sendas, viejos carriles y cualquier trocha en desuso, subimos rodeados de bujes y espinos.

Hasta que llegamos al collado de Los Frailes.

Ahora empezamos la bajada hacia el arroyo, al hilo de esta cresta de Los Frailes.

Por el fondo del vallejo, que aguanta verde y fresco.

Con algún resto de las tempestades pasadas.

En todo momento con las inquietantes agujas de la cresta como testigos.

Tenemos la mañana muy avanzada, hoy se nos echa el tiempo encima, otra mañana que no cumplimos el horario. 

A punto de llegar a la cascada del Fraile, en la parte izquierda de esa foto se descuelga el arroyo en busca del Escabas.

Esta roca, en imposible equilibrio, marca el punto por el que el arroyo encuentra el paso.

Llegamos a la Cascada del fraile, hoy es final de Julio, el verano está en todo lo alto, y este es un buen punto donde refrescarse. Hoy no tenemos unas buenas imágenes de la cascada y su poza, ya que nos encontramos con una gran familia dándose el pertinente remojón, lo que si pudimos apreciar, es que la cascada ha sufrido alguna modificación en el punto de desplome, y vierte las aguas hacia la izquierda (según la miramos desde abajo), no tenemos un buen documento del momento, pero algo ha cambiado en ella. Podemos recordar otra ruta por la zona en la siguiente entrada: El Cervilñuelo y la Cascada del Fraile. A continuación un par de tomas furtivas de la cascada.




Recorridas las dos terceras partes de la ruta, encaramos el tramo más desconocido y sorprendente de la mañana. Nos disponemos a remontar el cauce del arroyo en su tramo alto. Aproximadamente dos kilómetros, en el límite de lo accesible, subimos unos 250 metros de altitud superando los saltos, aunque hoy secos hay que emplearse a fondo.


Vamos a ir subiendo poco a poco.

Cerca de la cascada, el barranco es todavía bastante dócil.

Un lujo de barreras tobaceas, y pequeños remansos.

Enseguida nos vemos engullidos por la vegetación en las dos orillas del arroyo, bujes y espinos campan a sus anchas, esto es la serranía en estado puro.

El avance por las orillas es prácticamente imposible, nos metemos al arroyo para caminar sin problemas.

No viene nada mal refrescar los pinreles. 

Seguimos subiendo, con la debida precaución de no dañar las tobas y musgos que las colonizan.

Hemos recorrido unos 500 metros de arroyo desde la cascada, el caudal empieza a disminuir notablemente.

A partir de esta roca, desaparece el agua y el barranco gana carácter, vamos encontrando uno tras otro varios saltos que hay que salvar por donde buenamente se pueda.

Estamos en el tramo alto del arroyo, ya no hay agua, ahora vamos trepando por la roca para superar el gran desnivel.

Apenas alguna pequeña poza que sorteamos sin problema.

Por un lado o por otro, siempre encontramos paso.

Vemos desde arriba uno de los saltos, que con agua se ponen peligrosos.

Aunque para ser justos, nos hubiese gustado encontrar algo de agua por aquí.


El caso es que con agua, este salto hubiera sido algo complicado. Esto es un no parar, en este caso encontramos la roca equipada con una cuerda, que debe llevar aquí mucho tiempo, nos ayudamos con ella para remontar este tramo, aunque no nos da mucha confianza.

Parece que lo peor ya lo hemos superado, la mañana avanza y las fuerzas retroceden.

Lo que no afloja es la densa vegetación a ambos lados del barranco.

Hacemos una paradiña a coger aliento y echamos un vistazo a las rocas de la cresta de Los Frailes, hay nubes amenazantes, poca cosa.


Parece que la cosa mejora poco a poco.

Un último esfuerzo, y superamos lo más complicado del barranco.

Finalmente superamos el barranco, la cosa se pone más amable y llegamos al final de la ruta sin novedad, cansados pero satisfechos con lo que hemos vivido esta mañana. Una ruta serrana de las que hacen afición.


Vamos saliendo del tramo más complicado.


Y podemos agilizar la marcha por los márgenes del barranco, aunque en el fondo de esta imagen nos esperaba un mar de pinos volcados, que nos obliga a buscar paso por la parte derecha del barranco.

Hasta que por fin salimos de nuevo al Cerviñuelo, con las sabinas de testigos.

Y con esta vista de la cabecera del barranco pusimos punto final a la ruta.


Aunque realmente el final vino aquí, con los tercios pertinentes, un poco fuera de hora pero sin novedad.

Este es el plano de la ruta de hoy, con el circulo de inicio en la fuente del vaso, continuando hacia la casa de la Hortizuela, y la Cascada del Fraile.


Digamos que a la hora de los postres, llegamos al final de la ruta con unos doce kilómetros recorridos por barrancos y sendas. Nada que unos tercios no remedien, un lujo.

Aquí dejamos el trazado y perfil de la ruta de hoy:



Hasta pronto!!!

4 comentarios:

  1. Hola Luis. Gracias por la mención. Esa exuberancia y frondosidad de los arroyos del Escabas nunca defrauda.

    ResponderEliminar