Domingo, 23 de Mayo de 2021.
Así, como quien no quiere la cosa, hemos dado un salto casi de un mes. Y en este final de Mayo, el tiempo se pone en modo otoño, la primavera es lo que tiene, que no se decide.
El caso es que nos hemos encontrado esta mañana, con un tiempo típicamente otoñal tirando a fresco. Hoy hemos tenido que tirar de chubasquero, la previsión de lluvias ha dado pleno, y nos ha acompañado toda la mañana una lluvia persistente aunque liviana. Acompañada de un viento molesto, más parecía un día invernal. Las nieblas, se han encargado de aderezar todos estos ingredientes, con ese aire irreal, casi mágico de los días cerrados de invierno.
La ruta de hoy ha salido un poco improvisando, estamos en las estribaciones de la sierra de Tragacete, mirando a la zona sur, sobre el cenajo de los Calatravos y Peña Rubia muy cerca de Huélamo. Subiremos por la cresta de la Serrezuela, al Cerro de La Tajada y la Peña del Horno. Luego bajaremos por lo que viene a ser el comienzo del Arroyo de la Alconera, de vuelta al punto de partida, un vallejo verde como pocos, lleno de fauna serrana.
Nos adentramos por la carretera de la muela, desde el embalse de la Toba, y antes de subir a la peña del Acebo, cogemos la pista forestal de la Alconera. Pasada la Cañada del Mostajo, dejamos el vehículo en la entrada de otra pista que nos conduce a la Serrezuela, aquí empieza nuestra caminata de hoy.
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| A pesar del ambiente otoño/invernal que hemos encontrado esta mañana, la primavera se hace presente en estos montes, los arbustos han roto en flor, esto ya no hay quien lo pare. |
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| Hemos dejado los caminos principales, y ahora caminamos por este viejo carril que recorre la Serrezuela, la mañana húmeda nos ha obligado a pertrecharnos con fundas y chubasqueros. |
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| El monte se ha engalanado para la ocasión, a ras de suelo. |
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| Y en las alturas. |
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| El ambiente está contrario para la cámara de fotos, pero de vez en cuando hay que sacarla a oreo. |
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| Estamos subiendo al punto más alto de la Serrezuela, y las nieblas se hacen fuertes en las cumbres. Estamos rondando los 1.700 metros de altitud, que alcanzaremos un poco más adelante, en el cerro de La Tajada. |
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| En estos días de finales de Mayo, los prados de montaña lucen un verde rabioso gracias a la primavera tan generosa que estamos disfrutando. |
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| Estamos en el punto mas alto de la Serrezuela, en un momento en que la niebla nos lo permite, vemos allí abajo la zona del Masegar de Huélamo. |
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| Y delante de nosotros, el collado de la Erilla, donde bajaremos ahora, las nieblas dominan el valle del Júcar al fondo. |
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| Con un poco de zoom, nos acercamos a la zona de las Torcas de Huélamo, por donde subimos hace unos meses en medio de la nevada, una ruta preciosa. |
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| A través de la niebla, y con este gran pino para enmarcar, Huélamo. |
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| Vamos buscando un lugar al abrigo del viento. |
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| Y aquí, en el collado de la Erilla, con el embrujo de la niebla, y la persistente lluvia, hacemos la parada del almuerzo. Hace un viento incómodo, pero lo vamos a esquivar como podamos. |
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| Aquí bajo estos pinos que nos protegen de la lluvia, que por cierto, nos ha dado un pequeño respiro, paramos un momento a almorzar. Hoy el grupo está muy mermado, pero mantenemos el tipo. |
En condiciones normales, esta sería una ruta de buenas vistas sobre el Masegar, y sobre el valle del Júcar. Venimos caminando de forma perpendicular al Júcar. Ahora, desde el collado de la Erilla subiremos al cerro de la Tajada y Peña del Horno, caminando ya en paralelo al Júcar, que hoy se ha escondido bajo la niebla.
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| Dejamos abajo el Masegar, y seguimos ruta. |
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| La niebla se hace más densa por momentos, y arrecia la lluvia, el ambiente se torna invernal. |
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| Desde estas cumbres, la visibilidad es nula. |
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| Continuando por esta línea de cumbres, llegaríamos al Gamelloncillos, la Bandera y hasta la Peña del Alcón, pero decidimos buscar la bajada por el Arroyo de la Alconera. |
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| Al tiempo que descendemos, la niebla va desapareciendo, el vallejo está de un verde rabioso igual que todo el monte. |
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| Un poco más abajo nos espera esta familia. |
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| Muy poco asustadizas, nos observan atentamente. |
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| Entre sorprendidas e incrédulas. |
La vuelta es rápida, todo el camino es de bajada y en un momento nos ponemos en el final de la ruta.
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| Los gamones están en su punto. |
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| Y el resto de arbustos no andan mal tampoco. |
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| Miramos atrás, delante tenemos el comienzo de la Serrezuela que hemos recorrido hoy. |
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| Y mirando a nuestra derecha, tras la nieblas, La Bandera, una cima de referencia a la que volvemos una y otra vez. |
Con estas vistas, hemos llegado al punto de partida. La lluvia, aunque intermitente, nos ha acompañado toda la mañana, la niebla también, lo peor el viento. Ahora toca secar el plumaje al calor de una buena mano de tercios, creo recordar que paramos en Uña con tal fin. Al final otra buena mañana en el monte, como siempre. Estos días grises previos a los calores veraniegos creedme que se agradecen.
Hasta pronto!!!
