Las Fuentecillas en Las Majadas, cuando la nieve llegó a la sierra de Cuenca.

Domingo, 28 de Febrero de 2.016.


Último Domingo de Febrero en este invierno atípico y por fin hemos podido disfrutar de una gran nevada. El sábado nos deleitamos con el espectáculo de las hoces blancas y hoy nos hemos subido a la sierra.

El plan para hoy era una ruta circular por uno de los barrancos que baja desde Las Majadas hacia el río Villalbilla, entre Arcos y Portilla. Pero enseguida nos dimos cuenta que con la cantidad de nieve sería una temeridad embarcarnos en una ruta de gran envergadura, así que habrá que improvisar, el caso es pisar nieve y disfrutar del paisaje evitando riesgos innecesarios.

El caso es que hasta el pueblo la carretera estaba limpia, y ya sabemos lo que pasa en estos casos, vamos a ver si llegamos un poco más adelante......... a ver si llegamos a la pista de la sierra del agua............ total que atascamos nada mas salir del pueblo, ea, pues a ver si nos desatascamos que hoy no andamos nada de nada. Pero bueno con un poco de forcejeo,  un poco para adelante un poco para atrás, conseguimos sacar el vehículo de la cuneta y volvimos al pueblo donde lo dejamos y comenzamos a caminar en dirección al barranco del Molinillo, por la pista hasta el paraje de las Fuentecillas, hay mucha nieve y caminar campo a través será duro.

Al final más que ruta, nos salio visita, nos acercamos a las Fuentecillas a almorzar y vuelta sobre nuestros pasos disfrutando del ambiente mágico que se respira en un monte nevado, y más cuando la nevada es generosa como la de hoy. Hoy sobran las palabras, poco más que añadir, las imágenes hablan por si solas, quizá hemos puesto demasiadas pero es que a ver cual quitamos.

El ambiente es puramente invernal, el cielo está muy cerrado y amenaza con volver a descargar.





Dejamos atrás el momento atasco y nos encaminamos de nuevo hacia el pueblo. Las ventiscas habían acumulado en ciertas zonas gran cantidad de nieve en la carretera.





En el pueblo todo cubierto.




En la plaza, así como en las estrechas calles del pueblo, las ventiscas acumularon un buen tomo de nieve.




Saldremos hacia el monte, con esta bella imagen dejamos el puelo.




Ya vemos que salir de la pista hoy puede ser complicado.




Avanzaremos por aquí con permiso del ganado.




Que mira con asombro tal osadía. 




Mirar hasta donde le llega la nieve.




El caso es que seguimos avanzando.








Ya digo que estaba muy cerrado y se puso a nevar, ya no se puede pedir mas.








Llegamos a la cabecera del barranco del Molinillo, que ha recuperado el agua y hoy nos brinda esta estampa.




Con los robles completamente cubiertos.




Y sus aguas abriéndose paso.




Los que se abren paso también son los animales, ahora si que se ven bien los rastros.




En fin................
















Sigue nevando, y nosotros no os cuento como estamos disfrutando.












El problema es que para donde miramos hay foto.








Y rastro de animales.




Y el arroyo abriendo camino.








Y pinos rebosantes de nieve.




Bueno, y aquellos que no hay forma de que paren.












En toda esta zona hay varias fuentes, la nevada de hoy les vendrá muy bien.




Llegamos al viejo puente que cruza el barranco hacia la Losilla.




Nosotros seguimos sobre este manto virgen.












Y llegamos a Las Fuentecillas, ha dejado de nevar y se aclara un poco el cielo.




Este invierno ha costado ver imágenes así.








El rincón de Las Fuentecillas rebosa agua.
















¡Arrea! ya estamos.........

En este rincón, y al abrigo de un viejo corral, hubo que parar a almorzar y escuchar el silencio de un monte nevado, solo interrumpido por el sonido del agua de la fuente que rebosaba de gozo.






Frente a nosotros, en las cejas sobre la fuente de la Losa, los pinos cargados de nieve.








Cumplido el trámite alimenticio nos asomamos a ver el final del barranco del Molinillo, a la izquierda el Picón de Royofrío. Parece que quiere abrirse algún claro en el cielo, nosotros nos volveremos, bajar por la senda hasta la Solana será complicado.
















Pero no podemos dejar de mirar hacia allí, 




El caso es que volvemos sobre nuestros pasos, literalmente, ahora el camino está abierto y cuesta menos caminar.
















De vuelta reparamos en esta fuente que pasó desapercibida esta mañana.


Con su hilillo de agua que mantiene el pilón rebosante.





El sol aparece tímidamente.








Y de vuelta encontramos muchos mas rastros de los animales.








El paisaje se presta a todo tipo de pruebas de imagen.









De vuelta al pueblo nos encontramos con esta imagen, los terneros esperan pacientes y expectantes, mientras el ganadero les prepara un lecho firme donde depositar el alimento que en estos días les cuesta encontrar. Sirva esto como reconocimiento a todas las personas que con su trabajo mantienen vivo el medio rural, al fin y al cabo nosotros venimos de visita un rato y nos volvemos a las comodidades de la capital.



Al filo del medio día llegamos al pueblo, donde nos refrescamos con los tercios de rigor, (como si hiciese falta refresco). El caso es que lo hemos pasado bien y hemos visto las dos caras de la nieve, la idílica que nosotros venimos buscando y la engorrosa que complica la vida y el trabajo de los pobladores de la sierra.


Hasta pronto!!!






4 comentarios:

  1. Jjajaaja, cierto Luis, cuesta mucho desechar fotos de nieve en el monte. Todas valen.
    Preciosa las Fuentecillas así.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Toni, el caso es que todavía hemos guardado alguna, por no cansinear. En fin, como nieva tan poco hay que aprovechar.

      Un saludo.

      Eliminar
  2. Luiz, no Brasil nunca vimos algo assim, portanto para mim parece outro mundo, mas maravilhoso e encantador, nem imagino como sera o silencio que voce falou, ou o gosto da agua que corre pelas pedras

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Dilei, aquí las nevadas son cada vez más escasas, pero cuando se producen aprovechamos para empaparnos del mágico ambiente que se respira, en los montes nevados se puede escuchar el silencio, la nieve todo lo amortigua.

      Gracias por tu comentario, nos alegra mucho poder transmitir estas vivencias y sensaciones tan lejos de nuestras fronteras.

      Un saludo.

      Eliminar