Cerro de la Bandera, por el barranco de Doña Francisca.

Domingo, 20 de Septiembre de 2.015.


Nosotros de cuando en cuando volvemos a las rutas que ya hemos realizado, en este caso hace más de un año subimos aquí, el recorrido va a ser el mismo que en aquella ocasión en la subida, luego al bajar lo haremos directamente por un antiguo carril para hacerlo más rápido.

Un poco más arriba del cruce del puerto del Cubillo, en dirección a Tragacete, hay un pequeño puente por el que se puede cruzar el río Júcar, este va a ser nuestro punto de partida del día de hoy. El cerro de la Bandera está enclavado en plena sierra de Tragacete, con sus 1.794 es un buen mirador. En su cima hay una caseta de vigilancia, y vértice geodésico.



Nada más cruzar el río y mirando hacia Tragacete tenemos este paisaje, con la peña del halcón al fondo, los grandes espinos albares y la pradera que va reverdeciendo poco a poco.




Bordearemos por la izquierda el cerro de San Miguel, que tenemos delante, en la imagen no se aprecia pero esta mañana ya hemos visto la escarcha en estas praderas.




Un poco de zoom para la peña del halcón, que gran ruta hicimos por allí, la podemos recordar en este enlace Ruta por la peña del halcón.




Luego bajaremos por este vallejo que vemos aquí, 




La temporada de hongos está por comenzar, pero con las tormentas de finales de Agosto y alguna en Septiembre van apareciendo los primeros níscalos, a ver si se anima la cosa.




Al otro lado de la carretera vemos estos cerros que parecen llamarnos.

A partir de aquí nos vamos adentrando en el barranco de Doña Francisca, es un barranco por el que únicamente bajan las aguas de lluvia y tormenta, bastante empinado pero con buen firme, poblado de pinos, acebos, algún arce y mucho musgo en sus laderas que ahora van recobrando su esplendor.











Aquí poco sol va a entrar ya hasta la próxima primavera.




A ambos lados pinos y acebos.








Entre la humedad de los musgos aparecen estas frágiles setas.




Y tan pequeñas!!!




Y como siempre arriba los riscos.
Poco a poco vamos saliendo del barranco, llegamos a un collado muy cerca del Gamelloncillos, pero hoy vamos en dirección contraria a este, en busca del collado del aire y la Bandera.



Un acebo o grupo de acebos con su perfecta copa.




Hemos salido del barranco que tenemos ante nosotros.




En este soleado collado pararemos a almorzar, con estos esbeltos albares y los buitres merodeando como testigos.

Hemos salvado el mayor desnivel de la mañana, a partir de aquí iremos por un viejo carril que avanza por la ladera de esta sierra hacia el collado del aire y con un último repecho nos situamos sobre la Bandera desde donde veremos gran parte de la sierra.


Lo primero que vemos es, mirando hacia la Mogorrita, el Cagigar y la cresta del Ocejón.




Y hacia el otro lado una panorámica de la zona de la sierra de la madera, monte ensanche de las Majadas, la Muela......




La caseta de vigilancia, hoy no hay nadie.




La Mogorrita, hace dos años hicimos una ruta circular Tragacete-Mogorrita-San Blas-Tragacete, en el enlace la podéis ver, es del 2.013.




Hoy estamos casi todos.








En estas cumbres nunca faltan los pinos de formas imposibles.




Y desde estas alturas nunca falta la mirada al cerro de San Felipe.

Hoy tenemos que bajar rápido y lo haremos por el viejo carril para agilizar el trámite.


Alguna que otra vez hemos subido por aquí con todo terreno, aunque ahora está todo el carril muy deteriorado.



Pasamos junto a estos riscos en el rincón del Masegosillo.




Y nos despedimos de estos paisajes serranos.

El descenso ha sido rápido, pero todavía nos aguarda una sorpresa, volvemos a cruzar el Júcar y muy cerca del vehículo nos encontramos con lo que en un principio nos pareció una víbora, sacamos unas fotos y la dejamos seguir su camino. Luego hemos indagado un poco y tras varias consultas resulta que es una culebra viperina, (Matrix Maura) totalmente inofensiva, no obstante, ante la duda lo mejor es mantener una distancia prudente con estos bichejos por si acaso. 


















Con los pelos todavía de punta terminamos la ruta con unos refrescos en Villalba. Total que hemos pasado otra mañana en los montes en estos días finales del verano en los que las mañanas comienzan a estar bastante frescas y aparecen las primeras escarchas.


Os dejo el enlace al trazado de esta ruta:




Hasta pronto!!!


Paseo hacia los Olmos, Las Majadas.

Domingo, 13 de Septiembre de 2.015.


Hoy volvemos a la zona de Las Majadas, y vamos a asomarnos a la Dehesa de los Olmos desde la pequeña muela que se forma en el cerviñuelo, esta pequeña planicie que a pesar de que no tiene gran altitud respecto a su entorno más cercano, constituye un buen mirador en casi todos sus bordes. Además de la joya botánica que tenemos con la dehesa llena de Arces, toda esta muela y sus laderas son una buena muestra de la vegetación predominante en la sierra de Cuenca. Recorrerla es una buena manera de disfrutar de esta mañana pre-otoñal.

Podemos recordar otra visita que hicimos a la dehesa para contemplar el espectáculo de la cascada del Trabaque, a ver si vienen las lluvias y la próxima primavera podemos verla así de nuevo.


A esto me refiero cuando hablo de joya.

Con el vehículo aparcado en la carretera que conduce a la fuente de la Tía Perra comenzamos a caminar, una pequeña vuelta de reconocimiento de este terreno honguero donde los haya, nos damos cuenta de que aquí no ha llovido demasiado, y nos disponemos a subir a la muela buscando pasos y sendas de animales, ya que la vegetación es muy densa hay que apañárselas.


Los ejemplares que cortaron aquí hace unos años eran impresionantes.




Pero todavía quedan ejemplares como estos.








Vamos ascendiendo por esta ladera de Albares con el sotobosque de buje, buena combinación. Salpicado todo esto con algún ejemplar algo perjudicado.




Que también tienen su cosa.




Una vez en el alto de la muela ya tenemos vistas más allá del cerviñuelo, concretamente sobre el albergue de Tejadillos.




Sobre aquellas rocas ya estuvimos cuando bajamos a la cascada del Fraile.




Y el otoño llamando a la puerta de la Serranía.




Una vista general del cerviñuelo.

Ahora vamos a trazar una línea casi recta en busca de la vertiente contraria, la que se asoma a la casa de los Olmos y la Dehesa, desde allí también tendremos grandes vistas de territorio conocido.


Sobre la muela la vegetación se apacigua un poco, pero es un gusto caminar por estos pinares.




Y encontrarnos con estas florecillas típicas de esta época del año marcando el final del verano.




Los frutos del rosal silvestre totalmente maduros.




Y que decir de los del Majuelo.

Cruzando la muela vamos atravesando zonas de pinar y pequeñas praderas ahora resecas.


Colores propios de esta época cuando esperamos las lluvias.




Y van apareciendo los ocres y rojizos.

En un momento nos presentamos sobre la casa de los Olmos, hoy un montón de escombro casi irrecuperable. Aún a riesgo de parecer cansino repetiré que con estas antiguas casas que tenemos regadas por toda la sierra se podría haber creado una red de albergues, que junto con los senderos y cañadas que la surcan vertebrasen todo el territorio serrano. 

Desde aquí las vistas son muy buenas.


La casa de Los Olmos.




La dehesa, poblada de Arces.




Y a lo lejos el Picayo, y el valle del río Villalbilla.




La vegetación nos deja ventanas por donde asomarnos.




A ver si el otoño viene propicio y podemos ver los tonos rojos del Arce.




Mientras tanto podemos apreciar ligeros matices.










En este barranco que tenemos delante tiene su origen el Trabaque.








Tirando de zoom vemos el pueblo de Arcos de la Sierra y al fondo tierras casi alcarreñas.




Algunos Arces van cambiando de color.




Una mirada al estrecho del Trabaque.




Y una panorámica general de los Arces.

El objetivo de hoy está cumplido, nos hemos asomado a este privilegiado balcón, ahora ponemos rumbo de vuelta en un trazado totalmente recto en busca del vehículo.


Y nos volvemos a encontrar pinos secos, que no siempre están en cornisas y crestas, estos en mitad de la muela.




Con su curioso porte.




Toda la mañana nos ha acompañado este cielo algodonoso.








Aquí vemos claramente la disposición de la vegetación en esta muela, praderas y manchas de pinar.




Y de nuevo en el borde sobre el cerviñuelo los grandes Albares.

Al filo del medio día regresamos al punto de partida, ahora el sol ha vencido a las nubes aunque el aire continúa siendo fresco, tras el verano tan caluroso que hemos padecido se agradecen días como este.


Y nos encontramos en medio de la carretera esta vaca que parece pedir brasa.




Pero claro... te mira con estos ojos que.......


Total, que hemos pasado otra gran mañana por los montes visitando uno de los paisajes serranos más característicos, de haber un Top 10 en paisaje serrano este sería uno de ellos.


Al final como siempre unos refrescos y para casa, hoy no hay trazado de la ruta, pero no tiene pierde. Animaros a salir al monte que merece la pena.



Hasta pronto!!!